domingo, 26 de abril de 2015

Tarsus 2009 Reserva, D.O. Ribera del Duero

La sensación de sequedad que esperaba en el vino uruguayo Pizzorno tannat reserva 2011 (de anterior publicación) y que nunca aprecie, me apareció en este Tarsus reserva. No es una sensación desagradable ni mucho menos, es una sensación marcada con mucha intensidad pero que, en un par de segundos desaparece. Un reserva de calidad, con un gran precio. 



          Bodega: Bodegas Tarsus
          País: España
          Región: Ribera del Duero
          Año: 2009
          Tipo: Tinto
          Variedades: Tempranillo y Cabernet Sauvignon
          Alcohol: 14%
          Tipo de cierre: Corcho natural
          Página web bodega: www.bodegastarsus.com



La cata: A la vista, picota de capa alta limpio y brillante. En nariz es de intensidad medio alta, de gran paleta aromática. Aparecen a copa parada los aromas de la crianza, torrefactos, notas tostadas, cuero,especias dejando muy reducida la presencia frutal. La fruta toma el mando con unos breves giros de la copa. Ciruela, higos, notas de sotobosque. Un equilibrio en nariz interesante. En boca el vino se comporta de forma alegre en su paso, después de una entrada con sensaciones dulces, aparece su tanicidad (16 meses de barrica), de alta intensidad, pero corta en el tiempo. Buen volumen , correcta acidez. 

Lo marido con: Cordero asado
Precio:  aprox 18€
Fecha de cata: 24/02/2015

martes, 21 de abril de 2015

Noemi wines, pura pasión.

Jueves 16 de abril. Restaurante La Querencia (calle Pelayo, 32), siete y media de la tarde. Juan, dueño del Celler de Russafa, Maria José, propietaria del restaurante La Querencia y Noemí Arroyo, enóloga y propietaria de la bodega Noemí wines son los "culpables" de que alrededor de una treintena de personas estemos disfrutando de una interesante velada.


Noemí Arroyo
Rompe el hielo María José con una breve introducción y da paso a Noemí que nos cuenta interesantísimas cosas sobre la historia de la zona de Utiel-Requena, de sus viñedos y por su puesto de la bobal. La pasión con la que transmite estas historias las hace todavía más interesantes. 

Llegado el momento de hablar de sus vinos, que mejor manera de hacerlo que con una copa en la mano. Sus vinos y sus palabras prácticamente te transportan a sus viñedos, a la mesa de selección, a su sala de barricas. Pura pasión y brillante manera de transmitirla.

Empezamos la cata con Innato blanco. Elaborado con Sauvignon Blanc y Gewürztraminer y que la propia Noemí lo describió de color amarillo pajizo pálido con algún reflejo verde. Aromas frescos de flor blanca y lata de espárragos blancos, que son aromas muy presentes en boca. Equilibrado, fresco, elegante y sutil. Para maridarlo, María José preparó un bocado de tomate siciliano, mousse de habitas baby y escamas de parmesano. Perfecta armonía.

Pasamos a los tintos, con el vino Innato Madurado. Un vino sencillo, sin grandes alardes, ningún defecto y que resulta muy fácil de beber. Coupage de bobal, tinto fino y monastrell.  Color picota de capa alta, buena carga frutal (mora, ciruela), notas de cacao y balsámicos. En boca es suave, de paso rapido y mucho sabor a fruta. Lo maridamos con una tosta de sardinilla con confitura de tomate. 

El siguiente fue un mono varietal de bobal. Exuperio Rústico, un vino de mayor complejidad. Rojo intenso con tonos violácoes de capa alta. En nariz, puromoro de fresa, balsámicos, regaliz entre otros muchos aromas que van apareciendo a medida que va oxigenandose el vino. Buena acidez, sabroso, paso por boca fácil aunque las expectativas a la vista sean de un vino algo más pesado en boca. Mineral. Maria José preparo una tostada con seta de cardo, queso raclette y chistorra. Buena combinación.

Por último y como suele, ser el mejor vino de la bodega. A mí también me lo pareció. Exuperio Asentado 2012. De capa muy alta, con mucha lágrima. En nariz la fruta sale de la copa. Bien ensamblados aparecen aromas balsámicos, violetas, monte bajo, minerales...muy interesante cuando respire algo más. en boca esta lleno de fruta, es untuoso, unos taninos presentes sin molestar al conjunto. Equilibrado, redondo. Buen final. Lo maridamos con solomillo iberico con cebolla caremelizada a la miel y pesto.


Noemí me hizo recordar un artículo de Pedro Ballesteros (único español Master wine) en su sección "el catalejo" de la revista Proensa, que leí hace no hace mucho. y quisiera incluir la una frase, que forma parte del artículo "Bobal ¡Qué guapa eres!. Dice así "Camino de ser grandes llevan los Exuperios, de Raúl Zorita y Noemí. probé Asentado, que es como el vino de crianza intermedia en su gama y me fascinó lo delicado que es, con toques de lavanda y florales que cantan su tierra".



Dos descubrimientos en una noche, los vinos de Noemí y el restaurante La Querencia donde volvere seguro. A ti Juan, ya te conocía.

Y todo sólo por 10 euros. La próxima no te la puedes perder.



   


sábado, 18 de abril de 2015

Aponiente

De Levante rumbo Aponiente



Valencia 8:15h.  Cogemos un Ave rumbo a Sevilla. A la tripulación habitual se ha unido un pareja de grandes amigos, ella apenas hace unas horas sabe que Aponiente es su regalo de cumpleaños. En Sevilla nos espera un coche. Temporal durante la travesía hacia Puerto Escondido, que se va disipando al llegar a nuestro destino.  Nos inunda la calma y el buen hacer de los locales de la ruta que nos marcó Guillermo. Mil gracias. Por la noche, ya relajados tras el viaje, recorremos los escasos metros entre nuestro hotel y la calle Puerto Escondido, donde se sita Aponiente.


La entrada al restaurante es discreta, con un pequeño escaparate donde se sitúa la carta, una verdadera obra de arte. Nada más entrar, divisamos la cocina, allí está Ángel León supervisándolo todo y dando instrucciones.  Pasamos al salón, que si bien no es de grandes dimensiones, nos pareció más grande de lo que esperábamos . Tonos crema, blanco y  azul. Mesas amplias, sillas confortables, impecable mantelería blanca. El entorno es elegante y fresco.  En centro una mesa de servicio preside la sala. Camareros con traje azulón y pajarita de madera. El uniforme no pasa desadvertido y da todavía más frescura al entorno.

Una vez cómodamente sentados y con unas cervezas en la mano (pese a siempre solemos tomar un jerez de aperitivo), nos dan la carta, esa preciosa carta donde sobre un mapa fantástico se dibuja el mar de Aponiente, así como  mesetas, cabos, bahías etc.  todos con nombres de pescados.  Entendemos que quiere reflejar el mundo de este chef. Los platos sólo se anuncian por el pescado o producto protagonista. Todo aquí nos parece muy original y auténtico.
El propio Ángel León viene a tomarnos toma. Nos dice: -“Tras mirar la carta: ¿deciden quedarse con nosotros?”  Es como una invitación a un viaje y la respuesta era obvia. Elegimos el Gran Menú, el  más largo, su apuesta para 2015 en  “El Viaje a Puerto Escondido”.  Tras esto se acerca  Juan Ruíz Henestrosa, sumiller de Aponiente y uno de los protagonistas de la noche. Carta en mano nos pregunta sobre cómo queremos acompañar el menú, le indicamos que nos gustaría la opción de maridaje. Para nuestra sorpresa nos indica que este se hace exclusivamente con vinos de Jerez. La verdad es que hasta ese día nunca habíamos acompañado toda una comida con vinos generosos. Si bien son vinos que nos apasionan, partíamos de unos clichés sobre su lugar en el aperitivo, postre o como vino de contemplación, y en los menús sólo con algún plato, generalmente de pescado.  Pues bien, si el menú es todo de productos del mar y estamos en Cádiz ¿qué mejor maridaje?. Educadamente nos dijo que no nos preocupáramos, que nos iba a guiar y conducir por estos distintos vinos y que en un momento se realizaría un descanso con un vino no generoso para continuar. Y así fue.
Empezó el servicio y nos pusieron unos bajo platos de cuerda de barco, y sobre esta los entrantes: una tortilla de camarón, una mora de mar y un pan de mollete con calamar y sus interiores. La tortilla, del aspecto de una retícula natural,  era sabrosa ligera y etérea. Bajo esta, en un recipiente de cristal una ortiguilla, con un polvo de vinagre,  deliciosa. 


El pan de mollete caliente con el sashimi de calamar hacía  un conjunto perfecto, y la mora, colocada sobre una pirámide de moras de gominola,  también muy conseguida. 



Empezábamos de maravilla. Y tras esto se empezó imponer un ritmo muy preciso entre los platos. Las emociones se fueron sucediendo, y si bien no pasaremos a describir todos los platos, nos gustaría destacar la sardina, la ostra (puede que de las mejores elaboraciones que hemos probado), el cabracho, el ravioli y el plácton (plato que preferimos no desvelar su servicio para respetar el efecto sorpresa que produce el mismo).


 El servicio fue impecable, con un ritmo en sala perfecto. Angel león dirige todo el servicio, el mismo termina de emplatar en la propia mesa algunas de sus creaciones.
  


Hubieron momentos de autentica emoción. Y todo ello con un servicio de vino impecable. Todos los vinos nos fueron presentados, destacándose las virtudes de los mismos para su maridaje y las diferencias  entre los vinos previos. Todo con las palabras precisas para interrumpir ni el ritmo de la mesa ni el de las conversaciones de los comensales. Fue un auténtico viaje por los vinos de Jerez.



La tercera estrella es sólo cuestión de tiempo, de poco tiempo.

Oímos en sala que  pronto cambiarán a un local más grande. Ya tenemos una escusa para volver a viajar de nuestro Levante a Aponiente.


Los vinos de esa noche fueron: Fino en Rama Guitierrez Colosía, una edición especial para Aponiente. Saca de Abril. Manzanilla “La Goya” de Delgado Zuleta Edición Especial y formato magnúm. Fino en rama Cruz Vieja. Fino Bodegas tradición . Cava Colet Navazos 2011. Amontillado de 12 años El Maestro Sierra. Palo Cortado El Maestro Sierra. Oloroso en rama Cruz Vieja de bodegas Faustino González,  Moscatel Especial de Cesar Florido…y cómo nos apasionan los PX, finalizamos con un Mons Urium (invitación de la casa).

 Fotos de izquierda a derecaha y de arriba a bajo. 






Texto y fotos de Silan, nuestro experto en gastronomía.

miércoles, 15 de abril de 2015

Dos amigos 2013, D.O. Rias Baixas.

No creo que haya llegado a mi copa este vino gallego en sus mejores condiciones. En la última experiencia Verema celebrada en Valencia, lo probé, aunque no recuerdo si fue esta misma añada 2013. No fue de mis favoritos, de hecho, ni siquiera lo mencione en el articulo que publiqué. Considero que es un vino de "chateos", y algo elevado de precio para lo que ofrece. 

         
        
          Bodega: 2 amigos
          País: España
          Región: Rías Baixas
          Año: 2013
          Tipo: Blanco
          Variedades: Albariño 100%
          Alcohol: 13%
          Tipo de cierre: Corcho sintético
          Página web bodega: www.es2amigos.com



La cata: A la vista amarillo dorado pajizo limpio y muy brillante. En nariz es de intensidad medio baja. Es variada en aromas pero no elegantes ni sutiles. Flores blancas, cítricos, algún apunte tropical, sutiles vegetales y dominando la copa fruta amarilla de hueso. Repito sin orden ni elegancia. En boca es de entrada fresca, dulce. Destaca su alta acidez. Algo de estructura, volumen ajustado. Con recuerdos de fruta de hueso y algo cítricos. Final corto. No es un mal vino, pues no presenta ningún defecto, pero no te aporta ningún disfrute, por lo menos a mí.

Lo marido con: Ensaladas 
Precio:  aprox 12€
Fecha de cata: 31/03/2015

Vino perteneciente al club Vignerons, de Bodeboca.com

jueves, 9 de abril de 2015

Baroilo reserva 2009, D.O. Bierzo

Antes del vino os dejo el enlace de la entrevista que me hicieron para el blog "El Vino más Barato". Entrevista Vinos y platos Fuera de Carta.


La variedad de uva mencía ha sido, desde que empecé a conocer y explorar el vino nacional, una de mis favoritas, diría más la niña mimada. He viajado a conocer las zonas donde se cultiva, y he visitado varias bodegas. Este Baroilo reserva 2009, me ha gustado, también reconozco que no es lo mejor de la zona, pero tiene su encanto y podría substituir a muchos Riberas del Duero y Riojas de medio pelo, que inundan las cartas de muchos restaurantes.


          
          Bodega: Bodega la Luz
          País: España
          Región: Bierzo
          Año: 2009
          Tipo: Tinto
          Variedades: Mencía 100%
          Alcohol: 14,5%
          Tipo de cierre: Corcho natural
          Página web bodega: www.bodegaluz.com



La cata: A la vista es de color picota, de capa alta, limpio y brillante. En nariz disfrutas con su intensida alta llena de fruta negra y roja (algo más fresca esta última), notasde cueros, lácteos, chocolate, tostados suaves, tabaco, especias, balsámicos. Por poner un pero, algún punto alcohólico aparece de vez en cuando. En boca es de entrada dulce y fresca. Buen paso por boca, con presencia en el centro de la  misma. Taninos presentes, bien trabajados y que acompañan durante todo el recorrido. Sabroso, buena carga de fruta. Acidez ajustada. Final amargo, retro nasal frutal y un final no muy largo.

Lo marido con: Conejo asado
Precio:  aprox 15€
Fecha de cata: 31/03/2015

Vino perteneciente al club Vignerons, de Bodeboca.com


sábado, 4 de abril de 2015

Jordan Chenin Blanc 2013, Stellenbosch, Sudáfrica.

Después de más de un mes sin publicar un vino, regreso con un vino sudafricano, el primero del blog,  que me ha sorprendido gratamente. Excelente resultado en boca de la variedad chenin blanc tras su paso por las barricas. Sorprendente e interesante.



          Bodega: Jordan Wines
          País: Sudáfrica
          Región: Stellebbosch
          Año: 2013
          Tipo: Blanco
          Variedades: Chenin Blanc
          Alcohol: 14%
          Tipo de cierre: Rosca
          Página web bodega: www.jordanwines.com



La cata: A la vista bonito color amarillo pajizo con algún reflejo verde. En nariz es de intensidad media y con interesantes y agradables recuerdos cítricos, tropicales (piña, plátano, maracuya), apuntes florales frescos y un final aromático de bollería, que lo hace más complejo. En boca, destaco su paso, muy cremoso, lento, sabroso con buenos recuerdos de fruta (la misma que en nariz), bien ensamblados con sabor de miel de flores (azahar). Buena acidez. Final medio y un post gusto con sensación picante.

Lo marido con: Sepia a la plancha.


Precio: 16€ aprox.
Fecha de cata: 30/03/2015


jueves, 2 de abril de 2015

Celler del Tossal

La grata sorpresa que nos llevamos en nuestra primera visita, hizo que quisiéramos repetir en cuanto nos fuera posible, y así tener una visión más global a la hora de escribir una reseña. ¿Cómo podíamos haber estado tanto tiempo sin conocer el Celler?

En esta primera visita conocimos a Luca, nos impresionó su carta de vinos y tras pedir una copa de “El Tresillo” empezamos a hablar con él de vinos de Jerez, dadas las buenas reseñas de estos vinos que dispone en su carta. Nos ofreció maridarnos la comida y con el primer plato, unas ostras de Normandía, nos trajo 2 copas de Domaine de Montbourge Cuvée Spéciale, L’Etoile. Nos apasionan los vinos de Jura. Tras este gran comienzo, nos preguntó que qué nos parecía y le dijimos: “nos ponemos en tus manos”…y ya van tres visitas.
Nuestra segunda visita fue una cata de vinos de Envínate, magníficamente maridara por el portento creativo que tiene la cocina de este restaurante. Vinos muy personales, atlánticos, minerales, sin duda exclusivos (sobretodo ahora que Pitu Roca se ha quedado gran parte de la producción). Se acompañaron con magníficos platos, a destacar “la anchoa con torta del casar y carbón de rúcula”, las “manitas de cerdo con helado de wasabi y manzana” y un atrevido y a la vez exquisito “arroz de crestas”. En esta visita tuvimos la suerte de poder conocer en persona a JaviValencia y a Mara. Por fin les pudimos agradecer lo bien que lo hemos pasado gracias a sus útiles opiniones y sus conocimientos compartidos. Encantadores.
Y como no hay dos sin tres, programamos una tercera visita que es la que vamos narrar, si bien se puede resumir, al igual que las 2 previas en cinco letras: Bravo!
Local situado en pleno centro turístico de Valencia, quizás en la calle/plaza más concurrida del mismo. Entrada discreta y elegante. El restaurante está decorado en tonos blancos y crema, con estudiada luz y el contraste de los restos históricos de la muralla de la ciudad, que se ha respetado en el nivel inferior. Todo muy integrado. Mantelería blanca, cómodas sillas, buena cubertería e inmaculadas copas Riedel.
El conjunto es muy acogedor, anticipa la calidad y la calidez de la experiencia.
Fue una comida de amigos donde el menú y el maridaje ofrecido por Luca fue el siguiente:
-Quisquilla hervida. En su punto. Sabrosa. Empezamos de manera fantástica. Y si a eso le unes un Champagne Marie-Courtin Extra Brut Efflorescence, pues parece complicado superar esta entrada. El recorrido de este champagne fue memorable, desde las notas tropicales, al albaricoque, tostados y bollería. Burbuja fina y elegante. Fantástico. 


-Ensalada con salazones y espuma de mar. Continuamos con el punto de mar con un plato delicado pero con mucha esencia. El vino para acompañarlo fue un Palais Kesselstatt Riesling 2002. Un vino con sorprendente frescura para su edad, terpénico y con unos hidrocarburos muy presentes. Majestuoso el vino y la combinación. Ya nos estábamos emocionando. 


-Huevo a baja temperatura, guiso ibérico y patata chafada. Un plato con una base y sabor tradicional, con una moderna y elegante presentación. Muy, muy sabroso. 


-Suquet de Peix. Guiso marinero que requiere de buena materia prima y respeto por la misma en su elaboración. Sin duda así se hizo. Sin palabras. Para maridarlo, Luca nos trajo un Poully-Fuissé de Chateau des Ronters Clos Varambon 2012. Tras abrirse y expresarse, aparecieron elegantes notas minerales, flores blancas, especias y recuerdos amielados. Untuoso y muy largo. 

-Arroz con pollo y caracoles. En el Celler del Tossal los arroces se bordan. Este es el tercero que hemos probado, y al igual que los otros dos previos, estaba delicioso. Para acompañarlo, tras poder visitar la bodega de Luca para elegir el vino y siguiendo sus recomendaciones tomamos un Campagnes 2013. Un vino de Corbieres (Languedoc-Roussillon) elaborado por Maxime Magnon exclusivamente con cariñera. Tras las notas lácticas le siguió una fruta roja, madura, que pasaba desde las ciruelas pasas a la picota. Acidez y taninos presentes pero domados, para dar un conjunto muy integrado, sin aristas. Un gran maridaje. 


-Tarta Tatin. Francamente buena y francamente bonita. Maridaje final con un Barbeito Reserva (invitación de la casa). Maridaje fabuloso y bien complementado. 
Si a todo le esto le sumas un servicio atento, profesional y amable (además de el de Luca), la calidez de la experiencia y la grata compañía, hace que entendamos que sea el gran restaurante que es. 

El conocimiento de vinos de Luca es enciclopédico y ofrece como pocos lo hacen, la posibilidad de que el cliente comparta su emoción por los mismos. Sin duda es uno de los restaurantes donde mejor se come y se bebe, de los que gusta recomendar y compartir opiniones. Todo ello hace que la experiencia al visitar el Celler del Tossal sea completa…y con RCP difícil de superar. 
Bravo! Y esperamos poder decir que seguro que no hay tres sin cuatro, o cinco, o seis…

Texto y fotos de Silan, nuestro experto en gastronomía.